En torno a cargar el smartphone hay muchas teorías, consejos populares y leyendas urbanas. Que si es mejor desconectar el teléfono de la corriente una vez cargado, que si dejar el cargador enchufado consume mucho… Incluso he llegado a escuchar que hay quien carga el móvil en el trabajo para ahorrar, algo que no tiene demasiado sentido, porque no imaginas el dinero que te cuesta cargar el smartphone.
Aunque calcular cuánto dinero nos cuesta cargar la batería de nuestro teléfono es algo que podemos hacer de forma teórica, en Xataka siempre nos gusta hacer experimentos, como cuando quisimos saber cuánto cuesta abrir el frigorífico, así que he sacado mi medidor de consumo y mi teléfono móvil y he hecho algunas pruebas.
¿Cuánto cuesta cargar el smartphone?
A continuación encontraréis unas tablas con las mediciones y cálculos realizados, que coinciden bastante con las teóricas y, en cualquier caso, arrojan unos consumos que es como para pensarse si merece la pena preocuparse por ello.
Acción | Consumo (W) | Consumo anual (kWh) | Consumo anual (0,13 €/kWh) |
Cargar el móvil | 5 W | 3,65 kWh (2 horas al día) |
0,47 euros |
Cargador enchufado con el móvil cargado | <0,5 W* | 0,438 kWh (6 horas al día) |
0,06 euros |
Cargador enchufado sin el móvil | <0,2 W** | 1,168 kWh (16 horas al día) |
0,15 euros |
TOTAL | – | 5,26 kWh | 0,68 euros |
(*) Consumo orientativo. Aunque el medidor indica un consumo de 0.0W, es necesario saber que no es capaz de detectar consumos inferiores a 0,5W y, además, puntualmente se detectan picos de consumo (normalmente de 1 o 2W durante unos segundos) correspondientes al funcionamiento del teléfono, como la llegada de una notificación o una actualización en segundo plano, por lo que podemos considerar ese consumo medio con seguridad, aunque probablemente sea menor.
(**) En el caso del cargador solo, para que el medidor detecte un consumo de 0,5W es necesario enchufar al menos cuatro cargadores en una regleta, por lo que es seguro asumir un consumo inferior a 0,2W.
Cargar el móvil nos cuesta 50 céntimos al año, dejar el cargador enchufado, menos de 20.
Comprobación empírica
Los cálculos con consumos puntuales están muy bien, pero para no dejar cabos sueltos y hacer una comprobación empírica, coloqué el medidor en mi mesita de noche y dejé que acumulara el consumo durante 20 días.
El resultado: un consumo acumulado inferior a 0,2kWh (200Wh) (el medidor muestra 0,1kWh, pero pueden ser 0,18kWh), lo que coincide con los datos calculados, que indican un consumo orientativo de 10Wh al día. Este consumo corresponde a la carga del teléfono, ya que como hemos mencionado el medidor no detecta esos consumos fantasma tan pequeños que supone de dejar el cargador enchufado, sea o no con el móvil conectado.
Contrastando datos
Aunque los cálculos parecen lógicos y las comprobaciones claras, nunca está de más contrastar datos que han obtenido otros. Así, por ejemplo, según datos del Lawrence Berkeley National Laboratory, el consumo medio en carga es de 3,68W (no muy alejado de nuestros 5W) mientras que el consumo fantasma del cargador es, de media, 0,26W.
Sí sorprende que el consumo una vez se ha cargado el móvil sea de 2,24W, pero tampoco especifican qué teléfonos se han utilizado, el tipo de baterías o si se ha usado el teléfono mientras estaba conectado. En cualquier caso, la suma de consumos sigue siendo muy pequeña. Aquí sus datos:
Acción | Consumo (W) | Consumo anual (kWh) | Consumo anual (0,13 €/kWh) |
Cargar el móvil | 3,68 W | 2,69 kWh (2 horas al día) |
0,35 euros |
Cargador enchufado con el móvil cargado | 2,24 W | 4,90 kWh (6 horas al día) |
0,63 euros |
Cargador enchufado sin el móvil | <0,26 W | 1,52 kWh (16 horas al día) |
0,20 euros |
TOTAL | – | 9,11 kWh) | 1,18 euros |
Por otro lado, los chicos de Nergiza han utilizado un medidor mucho más preciso para obtener la intensidad instantánea de un cargador enchufado sin ningún aparato conectado, con resultados que encajan con los nuestros, siempre por debajo de esos 0,2W de consumo fantasma, y en algunos casos muy por debajo.
Cargador | Consumo (mA) | Consumo (W) |
Afeitadora | 0,71 | 0,17 |
Mini USB | 0,35 | 0,08 |
Nokia Reciente | 0,07 | 0,02 |
Nokia Antiguo | 0,44 | 0,11 |
Otro | 0,37 | 0,09 |
Media | 0,39mA | 0,09W |
Poniendo los datos en perspectiva:
Ahora que ya sabemos cuánto cuesta cargar el móvil (10Wh por carga, 3,65 kWh al año) y cuánto consume dejar el cargador enchufado (máximo 0,2W, 1,17 kWh al año), pongamos los datos en perspectiva.
Sabiendo esto, ¿merece la pena la preocupación de cargar el móvil en el trabajo o comprarse uno de esos cargadores solares para ahorrar? Los números son claros, cargar el móvil cuesta 50 céntimos al año, así que hay muchas otras cosas en las que podemos ahorrar. Además, la amortización de cualquier cargador solar se antoja complicada, porque en diez años solo habríamos ahorrado cinco euros.
El consumo fantasma del cargador del móvil representa menos del 0,05% de nuestro consumo eléctrico
Luego hay que considerar también si merece la pena desenchufar el cargador o no cuando no lo estamos usando. Descartando el consumo que hace el móvil mientras está enchufado y ya cargado, porque es un consumo que haría igualmente desenchufado, los menos de 0,2W del consumo fantasma del cargador suponen como mucho 1,6 kWh al año (0,2W x 22h/día x 365 días), lo que arrojaun gasto de 20 céntimos anuales.
La verdad, no es mucho, sobre todo teniendo en cuenta que hay otros consumos fantasmas de los que preocuparse, que 1,6 kWh es lo que gasta una estufa eléctrica en menos de una hora o que tiene muchísimo más impacto dejarse la pantalla encendida del ordenador o las luces (aunque sean Led) mientras no las usamos.
De hecho, este consumo fantasma del cargador supone menos de un 0,05% de nuestra factura eléctrica anual (según el INE, el gasto medio por familia se sitúa en torno 3250 kWh al año), e incluso suponiendo que dejamos dos o tres cargadores enchufados por casa, sigue representando el 0,15% de la factura. Harían falta 20 cargadores para que ese consumo supusiera el 1% de nuestra factura anual, y eso siguen siendo menos de 5 euros al año.
Finalmente, si extrapolamos los datos a todos los móviles que hay en España (orientativamente, 50 millones), obtenemos que si todos nos dejamos el cargador enchufado mientras no cargamos el móvil, serían 80 millones de kWh (80 GWh) desperdiciados al año, que no es poco, pues es la energía que consumen 25.000 mil familias al año. Sin embargo, comparado con los 250.000 de GWh que consumimos anualmente en España (un GWh equivale a 1 millón de kWH), supone el 0,03% del consumo anual. Y eso suponiendo que todos los cargadores de todos las líneas móviles del país están siempre enchufados, y con una estimación al alza de ese consumo fantasma.
La nota final: ¿Estropea la batería dejar el móvil enchufado?
Vale, ya hemos demostrado que dejar el móvil cargando varias horas o el cargador enchufado sin el teléfono conectado no supone un consumo significativamente mayor, o al menos no mayor que desconectar el móvil (y que gaste batería) y dejar el cargador en el enchufe, pero ¿estropea la batería dejar el móvil enchufado?
La respuesta es sencilla: no. Esto se debe a que las baterías de Li-ion llevan un circuito de protección ante sobrecargas que corta la corriente una vez las celdas han llegado a su nivel de carga (normalmente 4,2V), por lo que una vez el teléfono se ha cargado ya no le llega corriente a la batería.
Esto es fácil de comprobar con nuestro medidor, pues si con el teléfono enchufado y ya cargado, decidimos usarlo, vemos como el consumo aumenta inmediatamente, para luego volver a cero lentamente cuando dejamos de utilizarlo. Por otro lado, lo que no es recomendable es hacer un uso intenso del dispositivo mientras lo estamos cargando, ya que una aumento de temperatura sí puede ser perjudicial para las baterías de Litio.