Estamos usando nuestro ordenador con total normalidad, navegando por Internet, leyendo un artículo, y bajando unos archivos de una web fiable y, de repente, acabamos siendo víctimas de un virus. Esto nos puede pasar en cualquier momento, ya que los ataques informáticos y las infecciones de virus y malware son cada vez más complejas. Después de muchos sudores, finalmente terminamos por eliminar el virus del ordenador, y parece que todo vuelve a ir bien. Pero en realidad no es así, y muchas cosas no funcionan como deberían. Lo primero que pensamos es en formatear y reinstalar Windows, pero ¿y si no fuera necesario?
Cualquier tipo de malware (no solo los virus, sino también un troyano, o un gusano) realizan todo tipo de cambios en el PC para complicar al usuario la recuperación del sistema. Por ejemplo, desactivan el acceso al registro, o el administrador de tareas. Al eliminar el virus, la amenaza desaparece, pero muchas de estas funciones no vuelven a funcionar porque se han deshabilitado usando distintas técnicas de bajo nivel. Y, a la larga, puede ser una molesta bastante grande.
Formatear es cortar por lo sano. Borramos el sistema completo y lo volvemos a instalar de cero. También podemos usar las funciones de restablecimiento de Windows que nos permiten hacer lo mismo, pero de forma automática y más sencilla. Pero, aunque es la mejor solución tras una infección, esta no es, ni de lejos, la opción más práctica. Y mucho menos teniendo herramientas como Windows Malware Effects Remediation Tool.
Para qué sirve Windows Malware Effects Remediation Tool
Este programa es una herramienta de código abierto suyo principal objetivo es ayudarnos a recuperar el sistema después de una infección. Mientras que los antivirus se suelen limitar a eliminar la amenaza del PC, pero no suelen aplicar correcciones para deshacer los daños realizados por el virus, gracias a Windows Malware Effects Remediation Tool vamos a poder precisamente deshacer estos cambios para que Windows vuelva a funcionar con total normalidad.
Esta herramienta nos permite volver a habilitar la mayoría de las funciones que suelen desactivar los antivirus, como, por ejemplo:
- Editor de registro.
- Administrador de tareas.
- Símbolo de sistema, o CMD.
- Control de cuentas de usuario.
- Configuración de fondo de pantalla o tema.
- Configuración de color.
- Ejecutar.
- Tecla de Windows.
También puede restablecer muchas funciones deshabilitadas por el malware, como:
- Los iconos de los .exe y los .txt.
- La tecla Shell.
- La clave Userinit.
Y deshace otros muchos cambios que suelen realizar estas amenazas, como, por ejemplo:
- Elimina la propiedad de «proceso crítico» del malware.
- Deshace las restricciones de teclado.
- Alterna el botón principal del ratón.
Todo ello desde una interfaz muy sencilla y clara. Basta con bajar el programa, ejecutarlo, y nos encontraremos con una ventana como la siguiente:
Con un simple clic vamos a poder deshacer cualquiera de los cambios realizados por el malware para que las funciones o herramientas bloqueadas vuelvan a funcionar. Y, si lo preferimos, también podemos realizar una reparación completa y automática del sistema para olvidarnos de todo lo demás.
Bastará con un reinicio para que, por fin, podamos pasar página y olvidarnos del virus que ha intentado hacernos la vida imposible.